FANTASMA DE MI CORAZÓN!
Escribe ebrio, edita sobrio.
8 may 2015
Mañana: el futuro incierto.
1 may 2014
Diez cosas de las que te arrepentirás cuando seas viejo.
No haber hecho el tonto lo suficiente. Lo mejor en la vida es divertirse y pasar buenos momentos y ratos agradables con los tuyos. Hay que reír más, que es la mejor medicina y tomarse la vida con una sonrisa de oreja a oreja cada día. Reír y hacer reír.
No haber hecho ejercicio. Salud mental y física con cualquier ejercicio de todo tipo. Cuando todos seamos viejos lo mejor es tener bien los huesos y cuantas menos enfermedades mejor. El mejor antídoto: el deporte.
No haber viajado por el mundo. Cada vez hay más facilidades y precios económicos para hacer una escapada dentro de tu país o por el mundo entero. Ayuda a disfrutar del momento, a pensar y a conocer nuevas cosas.
Haber tenido miedo del dentista. A nadie le gusta ir pero es necesaria una buena salud bucal como complemento a la salud física. Y no sólo ir al dentista, también cepillarte los dientes cada día y en cada comida.
Haber trabajado demasiado. Trabajar no le gusta a nadie así que es mejor no concentrar todas tus fuerzas y tu vida en el trabajo, pues es sólo una parte de tu vida que hay que llevar con suavidad y cautela. Hay tiempo para todo.
No haber aprendido otro idioma. Aprender y aprender, que hay mucho tiempo y nunca es tarde. Te arrepentirás si no sabes otro idioma que no sea el nativo pues enriquece a la persona culturalmente.
No haber roto con esa pareja que te hacía la vida imposible. Las relaciones en pareja son para disfrutar, no para discutir o sentir celos. Si no alejas a esa persona que no te hace feliz de tu vida no podrás avanzar y estarás arrepentido toda la vida.
No haber escuchado a tus abuelos y familiares. La fuente de sabiduría por excelencia es la familia, donde los abuelos tienen un papel destacado. Cuando seamos nosotros abuelos también tendremos qué enseñar y lo mejor es escucharles.
Haber tenido miedo. No hay que temer a los cambios, sólo hay que perseguir lo que uno quiere y no dejarse guiar por los miedos e inquietudes que te plantea la vida. Si te caes, te volverás a levantar.
No haber sabido que eras el/la más guapo/guapa del mundo. Uno mismo tiene que quererse para que le quieran los demás, tal y como seas. Recuerda que nadie es perfecto y siéntete bien contigo mismo cada día de tu vida.
27 nov 2013
Tu otra mitad.
27 oct 2013
ENTRE A-MAR Y A-MARTE... NO!
EL TREN DE LA VIDA.
Interesante porque nuestra vida es como un viaje en tren, llena de embarques y desembarques, de pequeños accidentes en el camino, de sorpresas agradables, con algunas subidas y bajadas tristes.
Cuando nacemos y subimos al tren, encontraremos dos personas queridas que nos harán conocer el viaje hasta el fin, nuestros padres. Lamentablemente ellos en alguna estación se bajaran para no volver a subir más. Quedaremos huérfanos de su cariño, protección y afecto.
Pero a pesar de esto, nuestro viaje debe continuar, conoceremos otras interesantes personas, durante la larga travesía, subirán nuestros hermanos, amigos y amores. Muchos de ellos solo realizaran un corto paseo, otros estarán siempre a nuestro lado compartiendo alegrías y tristezas.
En el tren también viajaran personas que andarán de vagón en vagón para ayudar a quien lo necesite. Muchos se bajaran y dejaran recuerdos imborrables. Otros en cambio viajaran ocupando asientos, sin que nadie perciba que están ahí sentados.
Es curioso ver como algunos pasajeros a los que queremos prefieren sentarse alejados de nosotros, en otros vagones. Eso nos obliga a realizar un viaje separados de ellos. Lo difícil es aceptar que a pesar de estar cerca...NO podremos sentarnos juntos, pues muchas veces otras son las personas que los acompañan.
Este viaje es así, lleno de atropellos, fantasías, llegadas y partidas. Sabemos que este tren solo realiza un viaje, el de ida. Tratemos, entonces de viajar lo mejor posible, intentando tener una buena relación con todos los pasajeros, procurando lo mejor de cada uno de ellos, recordando siempre que en algún momento del viaje alguien puede perder sus fuerzas y deberemos entender eso.
A nosotros también nos ocurrirá lo mismo, seguramente alguien nos entenderá y ayudará.
El gran misterio de este viaje es que no sabemos en cual estación nos tocara descender. Pienso: ¿cuando tenga que bajarme del tren sentiré añoranzas? Mi respuesta es SI, dejar a mis hijos viajando solos sera muy triste. Separarme de los amores de mi vida sera doloroso.
Pero tengo la esperanza de que en algún momento nos volveremos a encontrar en la estación principal y tendré la emoción de verlos llegar con mucha experiencia de la que tenían al iniciar el viaje. Seré feliz al pensar que en algo pude colaborar para que ellos hayan crecido como buenas personas.
Ahora, en este momento, el tren disminuye su velocidad para que suban y bajen personas. Mi emoción aumenta a medida que el tren va parando... ¿Quién subirá? ¿Quién será?.
Me gustaría que pensarás que desembarcar del tren, no es solo una representación de la muerte o el termino de una historia que dos personas construyeron y que por motivos íntimos dejaron desmoronar.
Estoy feliz de ver como ciertas personas, como nosotros, tiene la capacidad de reconstruir para volver a empezar, eso es señal de lucha y garra, y saber vivir es poner obtener lo mejor de todos los pasajeros.
Agradezco a Dios porque estemos realizando este viaje juntos y a pesar de que nuestros asientos están separados, con seguridad del vagón es el mismo.
Tu amiga.